El impacto del embalaje de film BIO-V en el medio ambiente es el mínimo posible. La mayoría de los embalajes de plásticos biodegradables que tardan muchos años en descomponerse, no alcanzan porcentajes de descomposición altos, lo que supone un importante impacto medio ambiental. En cambio, la mayor parte de un plástico Bio-V arrojada a un vertedero pasará a ser materiales naturales como humus inerte, metano, CO2, agua, etc., al cabo de tres años.
Contacto más seguro para alimentos y consumidores
Los productos embalados en plástico tradicional pueden, con el paso del tiempo, absorber partículas dañinas para la salud del consumidor. El material con el que está fabricado el plástico BIO-V para los embalajes de film asegura una adecuada conservación del producto, cuyas propiedades no se verán alteradas por el contacto prolongado con el envase que lo contiene.
Al ser fabricantes de expositores de cartón y referencia en el sector, siempre buscamos opciones amigables con el medioambiente. En este caso, el plástico film BIO-V es una de los mejores vías para reducir considerablemente las pérdidas por mala conservación, especialmente en sectores con productos sensibles como: salud, cosmética, alimentación, garantizando que dichos artículos lleguen al consumidor final en buen estado.
¿El BIO-V tiene la misma resistencia que el plástico tradicional?
Los embalajes de plástico biodegradables BIO-V están fabricados con materia prima de última generación y diseñados para empezar el proceso de descomposición en entornos específicos, lo que favorece que sus propiedades perduren mucho mejor en el tiempo, y sean más resistentes en el momento del embalaje que los plásticos biodegradables tradicionales.
Este material también ofrece una mejor protección ante condiciones meteorológicas adversas tales como humedad, altas temperaturas o lluvias, y evita la descomposición temprana del producto en entornos de alto nivel de oxígeno.
Salud y seguridad con aprobación de FDA y ANVISA
Los productos desarrollados con la tecnología Bio-V utilizan materias primas de última generación, las cuales además de garantizar un altísimo desempeño en línea, están en conformidad con los requisitos de FDA (21 CFR 177.1520) y de ANVISA (Resoluciones RDC N°51 del 2010 y RDC N°105 de 1999) garantizando no solo la seguridad necesaria para su utilización sino también para los embalajes de alimentos.
Cuando se trata de envases flexibles con biodegradabilidad acelerada, los expositores de cartón y embalajes de film BIO-V son la solución más eficaz y económica del mercado.